jueves, 30 de abril de 2009

Bipolaridad, que bonito nombre tienes...


Hoy ha sido un buen día, sí. Tal vez los mejores días deberían ser esos llamados "normales", en los que sin ningún motivo en concreto te sientes bien, feliz... y no precisamente porqué te haya ocurrido algo buenísimo, quizás porqué no ha ocurrido nada malo. Pero hoy sí, han ocurrido cosas y por eso pienso que también debe ser considerado un buen día. ¿Merece la pena pasar nervios, miedos, inseguridades... para tener un buen final? Quizás si, de hecho.. si, es necesario.

Hoy tenía la visita de la inspectora... es curioso como nos referimos a ella dentro del entorno escolar "Avui et ve?" como si de la propia menstruación se tratara, esa que te viene avisando pero que te llega cuando menos te lo esperas, esa que puede incordiarte y estropearte un poco el día y hace que a veces te preguntes "pero porqué a mi?" Pues si, así es... "Hoy me ha venido". Y no, no me ha estropeado el día aunque yo no las tenía todas. Habíamos quedado que me visitaría de 3 a 4 con los niños de 1ºB, pero ya se sabe, a veces hay retrasos... y también son de los que te hacen poner nerviosa y te preocupan pensando que puede haber pasado o que pasará. El caso es que en vista de que no venía he decidio empezar la clase sin ella. Con lo bien preparadita que la tenía hoy... por una vez he intentado no dejarme seducir por el arte de improvisar. Pues bien, como me olía que la mujer podía presentarse en cualquier momento he intentado mantener un orden constante en la clase (que sí, es bastante dificil puesto que a veces parecen animales en vez de niños, aunque empiezo a pensar que no hay mucha diferencia entre unos y otros), trabajando y profundizando bien en la lectura... "La peixera mòbil"... "Nerea, de que ens parla el text?", "D'un peix que parla per mòbil". Atención, no imaginación por favor! T_T

Cuando ya tenía el trabajo más o menos acabado con los niños, y 15 minutos antes de las 4, ha venido, por sorpresa... como suelen hacerse estas cosas aunque, seguramente me diría "el que avisa no es traidor". Hemos hecho un poco el paripé, releyendo el texto de "La peixera mòbil" y ha hablando con ellos, haciéndoles preguntas y conversando. Ahí se ha confirmado todo... efectivamente, y como con la menstruación, cuantos más años lleves con ello más ameno y fácil se te hace.

A las 4 me he ido con ella para charlar. Por primera vez en bastante tiempo me he sentido como una alumna que se va al despacho para hablar, pero no.. hemos ido a la biblioteca. Se ha mirado y remirado mi programación anual y finalmente me ha deseado suerte con las oposiciones. Gracias, aunque yo lo que necesitaré no es suerte, sino un milagro.

A las 5 mientras bajaba los niños, la directora con una gran sonrisa me ha entregado el sobre, el sobre del juicio final. Mi evaluación... avisándome de antemano que me había puesto buenas notas. Feliz, he salido de la escuela y al girar la esquina de la calle no he podido evitar sacar el sobre del bolso para mirar los resultados. Y he llegado a casa, feliz de la vida, contenta porqué parece que a veces, sin proponértelo mucho la vida puede sonreirte o por lo menos hacerte un guiño. Y he pensado "Hoy, nada ni nadie puede estropearte el día". Pero claro, desde que he descubierto que la bipolaridad vive en mi (y como me gusta!) sé que paso de la felicidad al desastre total en menos que canta un gallo. Y así ha sido, aunque creo, y digo creo, que a pesar de los últimos imprevistos de la tarde-noche, nadie ni nada lo ha conseguido del todo.

Pero yo por si a caso, seguiré pensando en lo que me hace feliz ahora mismo, porqué señores... para poder alcazar la felicidad a veces hay q ser un poco egoísta, y aunque me cueste... estoy aprendiendo.

jueves, 23 de abril de 2009


Y que mejor día para estrenar un blog que hoy, Sant Jordi! Un Sant Jordi más, algo diferente pero uno más, y no por eso peor. Sigue haciendo el mismo bochorno de cada año, la gente sigue regalando libros y rosas y las Ramblas están saturadas. Y yo sigo disfrutándolo, porqué lo que más me gusta de este día es que todos, con pareja o no, podemos aprovecharlo. Aunque para que negarlo, sé que mañana estaré mucho mejor. O quizás no, no lo sé, por si acaso me dedicaré a escuchar todas las canciones de La Casa Azul porqué sus historias, por muy tristes que sean, siempre me suben el ánimo.

Feliç Sant Jordi!